Según la OMS el R0 (número de contagios causados por cada persona infectada) del coronavirus de Wuhan se sitúa en 1,4-2,5. Sin embargo, algunos autores mediante un análisis de la bibliografía más reciente (desde el 1 de enero al 1 de febrero 2019) sitúan con precisión un R0 medio de 3,281.

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Si lo comparamos con el R0=1,2-1,6 de la gripe A (H1N1)2 igual no resulta demasiado alarmante, pero usemos las matemáticas. Según el profesor Hugh Montgomery, en una cadena de transmisión de 10 pasos una persona con gripe (R0=1,3) contagiaría aproximadamente a 14 personas, mientras que partiendo prudentemente de un R0=3 de COVID-19 ¡obtendríamos 59.049 personas infectadas!3 ¿Podría deberse a la carga viral y a la morfología de los viriones?

Definimos la carga viral como la cantidad de partículas virales que encontramos en una muestra, expresada normalmente como copias de material genético viral (ARN o ADN) partido por mililitro4–6. Es una unidad de medida con múltiples aplicaciones. Por ejemplo, determinar zonas de alto riesgo biológico, como hospitales y concentraciones públicas, por su alto contenido en viriones (estado del virus fuera de la célula en forma de partícula viral infecciosa)7–11.

¿Qué tamaño tienen los viriones de COVID-19?

Semanas atrás en “medios de desinformación” que no voy a mencionar, incluso en un seminario de un hospital cuyo nombre correrá la misma suerte, se divulgaron contenidos erróneos acerca de estos viriones. Se informó de “un virus grande, de 400 nanómetros (nm)”. ¿Mezclaron el tamaño del genoma vírico con el tamaño del virión? ¿Confundieron el concepto de pleomorfía (la variación que existe entre los distintos viriones producidos por una célula) tomando de referencia un virión de un tamaño anormalmente grande? ¿O fue simplemente un bulo más del que se hizo eco la prensa para vender una noticia rápida?

El gobierno y una parte importante de la prensa prefirieron incurrir en lo que denominaré la “normalización patológica”: naturalizar la enfermedad de manera irracional y dogmática, hasta que se ha convertido en una crisis sanitaria de proporciones extraordinarias

Para averiguar la verdad sobre el tamaño podemos acudir a la bibliografía disponible: encontraremos que los viriones de COVID-19 son esféricos y pleomórficos, oscilando entre 70-90 nm12, 60-140 nm13­ y 70-80 nm14… bastante más pequeños de lo que se había venido difundiendo. Y es que el tamaño importa: cuanto más pequeño es el virión, más probabilidades tiene de superar los filtros de las mascarillas y, también, más tiempo puede permanecer en suspensión en el ambiente.

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Visualización de COVID-19 al microscopio electrónico de transmisión13

¿Cuándo se produce el pico de carga viral?

En el COVID-19 el pico de carga viral parece establecerse a los 5-6 días desde el comienzo de los síntomas15, en el SARS a los 10 días16,17 y en el MERS a las dos semanas 18,19.En el caso de la primera persona infectada por COVID-19 en Corea del Sur tuvo lugar al 5º día, seguido de una disminución a partir del 7º 15.

Además, al comienzo de la infección cuando no se manifiestan síntomas ya existe una capacidad de contagio silencioso20. La cual parece mantenerse en los pacientes asintomáticos cuya carga viral es prácticamente la misma que la de pacientes que sí manifiestan los síntomas, convirtiendo a estos pacientes en propagadores indetectables21 que dificultan el control de la cadena de contagios. Por esta razón, es de vital importancia un replanteamiento de la dinámica de transmisión16,22 que no se limite sólo a pacientes sintomáticos. Además, conocer el comportamiento dinámico de la carga viral a lo largo del curso de la enfermedad puede ser clave para determinar el momento óptimo de administración de antivirales15.

¿Dónde se encuentra mayoritariamente la carga viral?

En el caso de COVID-19 se ha observado que es más abundante en la nariz20. Sin embargo, en el virus del MERS se encuentra en la zona inferior de las vías respiratorias18,19,23 al igual que en el virus del SARS 24,25. Quizás esta sea una característica importante para entender la facilidad de transmisión del COVID-19 que, al localizarse en las vías altas, facilita el contacto con la mano y la dispersión por estornudos y tos.

¿Cómo se ha conseguido reducir la carga viral en los pacientes con COVID-19?

En el estudio del paciente cero surcoreano se halló una disminución estadísticamente significativa al día siguiente tras la administración de lopinavir/ritonavir 26, una combinación de dos antirretrovirales con sinergia positiva (uno potencia la acción del otro) usada para tratar el VIH mediante la inhibición de la proteasa, una enzima clave en el proceso de maduración de los viriones del VIH 27–30.

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Desarrollo clínico, tratamiento y carga viral del paciente cero (varón de 54 años) que fue el primero en causar transmisión terciaria fuera de China20
*El valor de Ct cycle threshold es inversamente proporcional a la carga viral hallada26. No pudo medirse desde el inicio del ingreso sino a partir del día 7 inclusive26

Otro tratamiento eficaz en la reducción de la carga viral fue hidroxicloroquina combinada con azitromicina31. La hidroxicloroquina es un principio activo menos tóxico que la cloroquina usada contra la malaria32. Al administrarla junto con azitromicina, un antibiótico de amplio espectro, se observó una disminución de la carga viral en los pacientes afectados por COVID-1931.

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Porcentaje de pacientes positivos en test de PCR para COVID-19 a lo largo de 6 días desde su admisión. Se encuentran divididos en grupo control, grupo tratado sólo con hidroxicloroquina y grupo tratado con combinación de hidroxicloroquina y azitromicina31

Una observación importante

Dadas las similitudes entre el COVID-19 y el virus del SARS, debería considerarse que el empeoramiento en la segunda semana no se deba a un aumento de la carga viral, sino a los daños ocasionados los días anteriores. Tal es la situación recogida en un estudio prospectivo sobre el virus del SARS, que determinó que la carga viral no estaba relacionada con el empeoramiento ocurrido en la segunda semana16. Por tanto, quizás estemos ahora ante el mismo escenario.

La carga viral… de la corrección política

Atrás quedaron los debates estériles sobre el carácter gripal de COVID-19, su tamaño, infectividad, tasa de letalidad, tasa de mortalidad y toda clase de interpretaciones poco rigurosas de datos, indicios, pruebas y evidencias. Hemos entrado en una profunda crisis de confianza en el Estado, el gobierno y los medios de información. Y todo por una sencilla razón: se ha priorizado el bienestar emocional frente a la prevención de una pandemia, sin lograr ni una cosa ni la otra. El debate entre las dos principales corrientes lideradas por Antoni Trilla33–37 (estrategia poco previsora) y Oriol Mitjá38–42 (estrategia más anticipativa) parece haber llegado a su fin.

Tarde o temprano, como señalaba en “COVID-19: El origen del pánico”, la verdad se acaba imponiendo. Hemos tenido a nuestra disposición abundantes publicaciones científicas sobre COVID-19 desde mucho antes de los contagios en España, y ni que decir tiene que también de otras enfermedades infecciosas similares como el SARS, el MERS, el ébola, la viruela, la gripe de 1918 y un largo etcétera.

Sin embargo, el gobierno y una parte importante de la prensa prefirieron incurrir en lo que denominaré la “normalización patológica”: naturalizar la enfermedad de manera irracional y dogmática, hasta que se ha convertido en una crisis sanitaria de proporciones extraordinarias. Y cabría preguntarse: ¿por qué el pensamiento científico no ha calado en nuestra sociedad? La respuesta quizá no está tanto en la propia sociedad como en quienes pueden y deben concienciarla … y no lo han hecho en absoluto, más bien justo lo contrario.

 

  1. Liu, Y., Gayle & Wilder-Smith. The reproductive number of COVID-19 is higher compared to SARS coronavirus. Journal of Travel Medicine (2020) doi:10.1093/jtm/taaa021.
  2. Fraser, C. et al. Pandemic potential of a strain of influenza A (H1N1): Early findings. Science 324, 1557–1561 (2009).
  3. Channel 4 Dispatches en Twitter: “‘If you are irresponsible enough to think that you don’t mind if you get the flu, remember it’s not about you – it’s about everybody else.’ Intensive care specialist Professor Hugh Montgomery explains why this coronavirus is different from the ordinary flu. https://t.co/h9sQorHQUv” / Twitter. https://twitter.com/C4Dispatches/status/1241803403619172359.
  4. Modjarrad, K. & Vermund, S. H. Effect of treating co-infections on HIV-1 viral load: a systematic review. The Lancet Infectious Diseases vol. 10 455–463 (2010).
  5. Peiris, J. S. M. et al. Clinical progression and viral load in a community outbreak of coronavirus-associated SARS pneumonia: A prospective study. Lancet 361, 1767–1772 (2003).
  6. Phillips, A. N. et al. HIV viral load response to antiretroviral therapy according to the baseline CD4 cell count and viral load. Journal of the American Medical Association 286, 2560–2567 (2001).
  7. Rajčani, J. Molecular Mechanisms of Virus Spread and Virion Components as Tools of Virulence. Acta Microbiologica et Immunologica Hungarica 50, 407–431 (2003).
  8. Hutchinson, E. C. et al. Conserved and host-specific features of influenza virion architecture. Nature Communications 5, 1–11 (2014).
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  11. Zhou, P. et al. Definition of linear antigenic regions of the HPV16 L1 capsid protein using synthetic virion-like particles. Virology 189, 592–599 (1992).
  12. Han, J.-M. K. et al. Identification of Coronavirus Isolated from a Patient in Korea with COVID-19. Osong Public Health and Research Perspectives 11, 3–7 (2020).
  13. Zhu, N. et al. A Novel Coronavirus from Patients with Pneumonia in China, 2019. New England Journal of Medicine (2020) doi:10.1056/nejmoa2001017.
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  23. Falzarano, D. et al. Treatment with interferon-α2b and ribavirin improves outcome in MERS-CoV-infected rhesus macaques. Nature Medicine 19, 1313–1317 (2013).
  24. Drosten, C. et al. Evaluation of Advanced Reverse Transcription-PCR Assays and an Alternative PCR Target Region for Detection of Severe Acute Respiratory Syndrome-Associated Coronavirus. Journal of Clinical Microbiology 42, 2043–2047 (2004).
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  33. Antoni Trilla: “M’agradaria trobar una vacuna pel virus de la por.” https://www.rac1.cat/programes/20200208/473358346385/antoni-trilla-coronavirus-por-clinic-mobile-congres-telefonia.html.
  34. Coronavirus de Wuhan: “No hay nada más contagioso que el miedo” | Sociedad | EL PAÍS. https://elpais.com/sociedad/2020/01/30/actualidad/1580407947_671784.html.
  35. Antoni Trilla: “No hi ha una raó objectiva, des del punt de vista científic, per cancel·lar el Mobile.” https://www.ara.cat/societat/entrevista-doctor-antoni-trilla-coronavirus_0_2397360345.html.
  36. Antoni Trilla: “La por al coronavirus ha vençut la realitat mèdica” – Els matins. https://www.ccma.cat/tv3/alacarta/els-matins/antoni-trilla-la-por-al-coronavirus-ha-vencut-la-realitat-medica/video/6029882/.
  37. Antoni Trilla: «Es una locura, con el coronavirus se están montando unas bolas espectaculares». https://www.lavozdegalicia.es/noticia/sociedad/2020/02/14/antoni-trilla-coronavirus-ciencia-perdido-batalla-frente-miedo/00031581701632494207128.htm.
  38. Oriol Mitjà busca dinero para la vacuna contra el Covid-19. https://www.metropoliabierta.com/el-pulso-de-la-ciudad/sanidad/cientifico-barcelones-busca-dinero-vacuna-covid-19_25289_102.html.
  39. Oriol Mitjà exige un “confinamiento total” de dos semanas. https://www.metropoliabierta.com/el-pulso-de-la-ciudad/medico-oriol-mitja-pide-confinamiento-semanas_25217_102.html.
  40. Investigador Oriol Mitjà insta aplazar Mobile para evitar coronavirus. https://www.elperiodico.com/es/sociedad/20200211/oriol-mitja-coronavirus-mobile-7843899.
  41. Oriol Mitjà sobre l’impacte del coronavirus: “Hi hauria d’haver una restricció de viatgers com han fet altres governs” – Preguntes freqüents. https://www.ccma.cat/tv3/alacarta/preguntes-frequents/oriol-mitja-sobre-limpacte-del-coronavirus-hi-hauria-dhaver-una-restriccio-de-viatgers-com-han-fet-altres-governs/video/6030404/.
  42. El coronavirus crea alarma porque es nuevo, no por su gravedad, según experto. https://www.lavanguardia.com/vida/20200211/473455536988/el-coronavirus-crea-alarma-porque-es-nuevo-no-por-su-gravedad-segun-experto.html.
Foto: Martín Sánchez

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