En las últimas dos décadas, Irán ha desarrollado en Hispanoamérica una estrategia de colonización silenciosa que combina elementos políticos, económicos, religiosos y militares. Se presenta como defensor de los pueblos oprimidos y predica su liberación mediante una lucha revolucionaria suministrando drones de combate y tecnología militar que contribuyen a la desestabilización regional y al financiamiento del terrorismo y del crimen organizado. Lo que comenzó como una serie de acuerdos diplomáticos y comerciales, hoy se ha convertido en una red de alianzas estratégicas con gobiernos que comparten una narrativa de resistencia contra Estados Unidos y Europa. Venezuela, Bolivia, Nicaragua y Cuba se presentan como los principales socios de Teherán en el continente, pero detrás de la retórica de cooperación “solidaria” se esconden intereses mucho más oscuros: transferencia de tecnología militar, negocios opacos con el petróleo y el uranio, redes de narcotráfico y lavado de dinero al servicio del terrorismo internacional. La República Islámica no ha llegado a la región para tender puentes culturales, sino para tejer complicidades con regímenes autoritarios, ganar influencia geopolítica y erosionar la identidad occidental y cristiana del continente.
Irán, Rusia y China tiene un plan y trabajan de forma coordinada, ya es hora de que seamos conscientes de ello
Alianzas estratégicas con gobiernos de izquierda
Los gobiernos de izquierda en Hispanoamérica, especialmente Bolivia, Venezuela, Nicaragua y Cuba, se han convertido en socios estratégicos de Teherán. Para ellos, Irán representa un aliado frente a Estados Unidos y Europa y un modelo de resistencia frente a sanciones internacionales. El caso boliviano es ilustrativo: durante el gobierno socialista de Evo Morales, la relación con Teherán se estrechó significativamente. En 2008 se acordó la construcción de fábricas estatales de cemento en Oruro y Potosí, financiadas por Irán y Venezuela con un crédito de aproximadamente 230 millones de dólares. En 2013, la visita de Mahmud Ahmadineyad consolidó la cooperación: Bolivia recibió equipamiento técnico para el canal Abya Yala TV, utilizado tanto para propaganda oficialista como para proyectar una imagen favorable del mundo islámico. En julio de 2023, el ministro de Defensa boliviano, Edmundo Novillo, firmó un acuerdo en Teherán para adquirir drones, capacitar milicias y reforzar el control del ciberespacio, declarando a Irán como un “modelo de libertad” por su “notable progreso en ciencia y tecnología, seguridad e industria de defensa, a pesar de las sanciones”. El ministro pasó por alto que su aliado iraní juega un papel directo en la expansión del terrorismo islamista.
Expansión económica y tecnológica
Paralelamente, Irán conquista sectores estratégicos invirtiendo en el campo energético, agrícola y científico. En Bolivia construyó hospitales, plantas lácteas e impulsó la mecanización agrícola, eso sí, todo a crédito. En la Venezuela chavista, los acuerdos bilaterales incluyen: construcción y reparación de refinerías y plantas petroquímicas (El Palito, Paraguaná), y el suministro de 1,7 a 2,8 millones de repuestos desde 2022. Además, el Plan de cooperación de 20 años firmado en junio de 2022 establece la exportación de 200.000 automóviles y la reactivación de Venirauto, una empresa de capital mixto entre Venezuela e Irán (Saipa), que estaba inactiva desde 2015. ¿Qué se está entregando y quién se lucra con ello? A cambio de proyectos industriales y automóviles, Irán recibe el crudo pesado, exenciones arancelarias y contratos estatales en Venezuela. Estos acuerdos fortalecen también a PDVSA, la petrolera estatal venezolana y protegen al régimen de Maduro frente a sanciones internacionales.
Apoyo militar a las dictaduras y el terrorismo
La República Islámica de Irán no solo ha impulsado el suministro de drones, sino que también ha establecido instalaciones en Venezuela para entrenar a personal militar venezolano en su fabricación y mantenimiento. Desde mediados de los 2000 se ensamblaron drones Mohajer 2, bajo el nombre “Arpía”, en la Base Aérea Libertador de Maracay. Actualmente se desarrollan modelos más avanzados como Mohajer 6 y Shahed 131. Los informes de inteligencia registran un interés creciente de gobiernos hispanoamericanos en sistemas como los Shahed 129, 136 y 191, algunos de los mismos utilizados en conflictos en el Medio Oriente. Lucha contra el narcotráfico dicen… La realidad es que estos equipos no solo refuerzan la capacidad militar de la dictadura venezolana, sino que terminan en manos de grupos irregulares como el ELN en Colombia, que los emplean en ataques contra las fuerzas militares. Lejos de combatir el narcotráfico, los drones terminan en manos de grupos irregulares y regímenes autoritarios constituyendo una tecnología desestabilizadora que amenaza tanto a América Latina como a los Estados Unidos.
Riesgos nucleares
Otro punto crítico es el suministro de uranio, que abastece al régimen islámico y es esencial para llevar a cabo su programa nuclear. En 2008, Chávez firmó un acuerdo con Irán para transferir uranio bajo la fachada de proyectos civiles, como fábricas de tractores, a cambio de tecnología militar, incluidos drones. El programa nuclear iraní es ampliamente conocido; sin embargo, lo que realmente preocupa a la comunidad internacional es su capacidad efectiva para fabricar armas nucleares. Esta capacidad fue confirmada por el propio canciller iraní, Abbas Araghchi: Irán ´´había alcanzado la capacidad para desarrollar un arma nuclear, pero que no lo ha hecho por falta de voluntad´´. De poco sirvieron las negociaciones de Kaja Kallas, jefa de la diplomacia de la UE, con Abbas Araghchi, destinadas a inspeccionar las instalaciones y limitar el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de sanciones. Teherán se negó a colaborar, asegurando que ‘su capacidad defensiva no es negociable dentro del diálogo sobre su programa atómico’. Tras el fracaso de las conversaciones, Israel y Estados Unidos bombardearon las instalaciones nucleares iraníes, provocando que el régimen islámico respondiera con decenas de misiles balísticos contra Israel. Tal y como informa el OIEA, el volumen de uranio altamente enriquecido en Irán supera los 441 kilogramos, suficiente para construir unas diez armas nucleares.
Presencia marítima y diplomática
En 2023, Irán intentó atravesar el Canal de Panamá con buques de guerra, aunque finalmente la desistieron y fueron recibidos en Brasil por su anfitrión, Lula da Silva. He aquí otra maniobra simbólica de desafiar al occidente y al poder estadounidense. La cooperación de los gobiernos socialistas de Iberoamérica con el régimen islámico no es una novedad y ese despliegue naval puede traducirse en una presencia militar más significativa en la región. Esta alianza la confirma también el creciente número de instituciones y visitas diplomáticas iranís en América Latina. Desde la llegada de Ahmadineyad al poder en 2005, Irán ha incrementado su presencia diplomática en la región, abriendo embajadas en Bolivia, Colombia, Ecuador, Nicaragua y Uruguay, principalmente bajo gobiernos izquierdistas de Evo Morales; Rafael Correa; Daniel Ortega; Tabaré Vázquez.
Vínculos con Hezbolá y crimen organizado
El capítulo más sensible de la influencia iraní en Hispanoamérica es el vínculo con la organización terrorista Hezbolá. Su financiamiento proviene, en buena medida, del narcotráfico suramericano y del blanqueo de capitales. Las investigaciones documentan cómo el dinero de la cocaína se lava a través de sofisticadas redes: compra de autos de lujo en Europa (Porsche, Range Rover) o relojes de alta gama (Rolex, Patek Philippe), que luego se trasladan al Líbano o África y se venden en efectivo. Solo en una tienda de Münster (Alemania), el grupo adquirió relojes por 14 millones de euros en poco más de un año. Estas operaciones permiten canalizar cientos de millones de dólares hacia Oriente Medio, destinados a financiar las operaciones militares de Hezbolá, incluyendo su participación en la guerra de Siria. La CIA estima que la organización logra blanquear unos 500 millones de dólares anuales gracias a los vínculos con carteles de droga en Venezuela, Colombia y Ecuador. Además, en 2022, un vuelo de la aerolínea Emtrasur fue retenido en Argentina con exmiembros de la Fuerza Quds del IRGC, evidenciando posibles transportes clandestinos de armas o personal de Hezbolá. Asimismo, Hezbolá y la Fuerza Quds del IRGC operan en La Triple Frontera (Argentina-Brasil-Paraguay), identificada como el centro de redes criminales transnacionales.
Influencia religiosa y cultural
La influencia iraní también se extiende en el ámbito religioso mediante la apertura de mezquitas y centros de estudios islámicos en la región. Algunos datos por país: México: más de 25 mezquitas y centros islámicos; Venezuela: más de 15; Colombia: al menos 10; Argentina: 9; Chile y Ecuador: unos 5 cada uno. Además de estos centros, Irán ha promovido la expansión del islam chiita mediante centros culturales y programas educativos. Esta expansión se enmarca dentro de una estrategia geopolítica más amplia de Irán en América Latina. Estos programas activos en varias ciudades de América Latina, incluyen clases de religión en español; traducción de la literatura islámica y viajes de estudios a Qom, Irán logrando influir en intelectuales locales y formar líderes religiosos en sus comunidades. Además, a través de medios propagandísticos como HispanTV, canal estatal iraní en español, operado por IRIB, transmite narrativas antioccidentales que refuerzan los lazos culturales y políticos con Oriente Medio.
Conclusión
La relación entre Irán y los gobiernos de izquierda en Hispanoamérica no es un simple intercambio diplomático. Es una alianza peligrosa que mezcla ideología, crimen organizado y armamento, y que convierte a estos países en peones de una teocracia que desprecia la libertad y financia el terrorismo internacional. Las consecuencias son evidentes y alarmantes:
- Evasión de sanciones y oxígeno a las dictaduras: Teherán brinda recursos para sostener regímenes asfixiados que, a cambio, ceden soberanía;
- Amenaza a la seguridad regional: drones, entrenamiento militar y redes criminales refuerzan a dictaduras y grupos irregulares, mientras la Triple Frontera se consolida como base de operaciones de Hezbolá;
- Desinformación y penetración ideológica: HispanTV y centros culturales islamistas difunden propaganda antioccidental, erosionando identidades locales y sembrando divisiones;
- Expansión bajo fachada internacional: Irán se presenta en la ONU y en foros como el Movimiento de Países No Alineados como un actor independiente, cuando en realidad utiliza esa plataforma para blindar las violaciones de derechos humanos y expandir sus intereses estratégicos en América Latina.
Irán, junto a sus aliados rusos y chinos, busca alejar a Hispanoamérica de Occidente. Lo que está en juego es mucho más que acuerdos comerciales: es la instalación de un aparato de control y de armamento que compromete la estabilidad regional. Irán, Rusia y China tiene un plan y trabajan de forma coordinada, ya es hora de que seamos conscientes de ello.
*** Marzena Kożyczkowska es investigadora hispanista, traductora, profesora y analista del mundo hispanohablante. Graduada en Filología Hispánica por la Universidad Ateneum de Gdańsk (Polonia), licenciada en Lenguas y Literaturas Modernas, está especializada en Estudios Hispánicos en la Università degli Studi di Palermo (Italia) y tiene el Máster en Estudios Hispánicos Superiores de la Universidad de La Rioja (España).
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