Entre el 6 y 9 de junio de 2024 los ciudadanos de la Unión Europea elegirán a sus diputados para el Parlamento Europeo. Estas elecciones -que se realizan cada cinco años- cobrarán una importancia excepcional debido a la crisis que sufre la Unión en temas cruciales como la economía, la inmigración ilegal, la seguridad y las libertades, con la posibilidad del cambio en las mayorías parlamentarias y de dirección de las políticas comunitarias que serán clave para el futuro de los países miembros de la UE.
La política europea es compleja y muchas veces difícil de comprender debido a los múltiples factores que dificultan el entendimiento de fuerzas políticas, que en principio comparten muchos valores y objetivos, pero que, sin embargo, se distancian por cuestiones históricas nacionales irresueltas e intereses particulares muchas veces coyunturales. El tablero de juego donde deberían aglutinarse las fuerzas afines y ganar la partida se parece, por momentos, más a un puzle con piezas difíciles de encajar. De ahí los acuerdos de la actual mayoría ursuliana de PPE y S&P, junto a Renew y Greens/EFA, en la dirección de leyes y normativas absurdas y perjudiciales para el conjunto de los europeos, y las diferencias, a pesar de mucha sintonía y trabajo conjunto, entre ID y ECR.
Desde de los confines del antiguo Imperio Romano también se oyen voces disidentes a la hegemonía burocrática de Bruselas
Mientras tanto, desde Rumanía y encabezado por el partido AUR, o Alianța pentru Unirea Românilor (Alianza para la Unión de los Rumanos), han visto la posibilidad de cambiar esa mayoría ursuliana, adelantándose con propuestas y candidaturas que aporten a esa alternativa europea soberana en la construcción de una casa común del centroderecha europeo, y de formar parte de ese desafío de crear el primer gobierno histórico alternativo de la UE. Vale recordar que Rumanía es la nación europea que conjuga la antigua tradición dacia y la cultura romana con la tradición cristiana y europea. Todo ello lo llevan con orgullo en su gentilicio. Los rumanos son los latinos del este que han sabido resistir a lo largo de una historia milenaria los embates de crueles invasores y sangrientas tiranías. Rumanía hoy es un estado de la Unión Europea que busca el sitio que le corresponde y que no se resigna a ser considerado por algunos un país de segunda categoría porque en realidad no lo es, ya que su riqueza cultural, humana y también económica es inmensa.
AUR, según los últimos sondeos de intención de voto, es el segundo partido político preferido en el país para las elecciones nacionales generales del año próximo y el primero para las europeas del 2024 con un 27% de preferencias. Sin lugar a duda, la aportación de diputados conservadores y patrióticos en Bruselas podría ser determinante para la construcción de ese eje político parlamentario en formación, que sea una alternativa real a la actual corrección política de la UE.
¿Es posible que las elecciones de junio modifiquen el panorama en la UE? De momento parece difícil cambiar las mayorías parlamentarias pero no es imposible. AUR, liderado por el carismático George Simion -un político a tener en cuenta debido a su personalidad y gran capacidad para conectar con sus compatriotas-, dio ese primer paso en dirección al cambio. El 22 de julio pasado presentó su proyecto político y sus candidatos europeos. La cita tuvo lugar el Arenele Romane, un elegante anfiteatro de lineas clásicas construido en el Parque Carol I de Bucarest, que acogió a mas de 8000 participantes. En la convocatoria dejó claro que su programa hace hincapié en la soberanía de Rumanía y que no permitirá que “nuestra política sea dictada por funcionarios europeos y políticos de otros estados”. Allí se perfilaron sus puntos programáticos para las próximas elecciones europeas con el lema “Rumanía soberana, visible en Europa”:
“AUR apoyará a aquella Europa que respete a sus ciudadanos, las libertades fundamentales, la identidad cristiana y la familia como pilar de la sociedad. AUR garantizará los derechos de todos los rumanos que viven en la UE y fuera de ella. Apoyamos la democracia real dentro de la UE, la libertad, la igualdad y la promoción de la paz. Rumia es miembro de pleno derecho de la UE, somos un país soberano, que contribuirá al desarrollo y la promoción y la estabilidad de las naciones europeas. Defendemos una Europa segura y próspera para todos sus ciudadanos. Fomentaremos la cohesión dentro de la UE, la reducción considerable de las diferencias económicas entre los estados de la UE. AUR apoya la adhesión de la República de Moldavia a la Unión Europea, siendo la forma más concreta en este sentido la unión libremente consensuada de los dos estados rumanos”, reza el plan del partido con la vista puesta en Bruselas.
George Simion, estuvo acompañado por numerosos eurodiputados como los italianos Marco Campomenosi y Paolo Borchia de Lega Salvini Premier y Carlo Fidanza de Fratelli d’Italia, el polaco Kosma Zlotowski de Ley y Justicia, Charlie Weimers de Demócratas Suecos, o Jaak Madison del Partido Popular Conservador de Estonia; todos ellos parlamentarios pertenecientes a los grupos políticos Identidad y Democracia y Conservadores y Reformistas Europeos. Estos importantes apoyos políticos de parlamentarios europeos no dejan de ser muy significativos porque indican que, a pesar de las lógicas diferencias que puedan existir a nivel nacional e incluso acerca de puntos de vistas divergentes sobre algunos asuntos geopolíticos, existe una clara voluntad de entendimiento para facilitar avanzar en esa unidad de las fuerzas “conservadoras”, sin vetos, con sus diferentes “sensibilidades” e intereses particulares.
Durante el lanzamiento de la campaña sobre el escenario del Arenele Romane, el diputado y presidente de AUR remarcó que: “Mientras Rumanía está enterrada en la pobreza, la Comisión Europea habla de nuevas pandemias que negarán nuestros derechos, de identidad de género. Iremos al Parlamento Europeo a luchar por la familia normal, formada por una mujer y un hombre. Poder poder decir sin temor »mamá» y »papá». ¡Dios bendiga a Rumanía!”, cerrando su discurso en un marco de banderas nacionales y con la música de fondo de la canción “Invocatie” de la banda de rock Phoenix -todo una leyenda en el país- con una puesta en escena de luz, color y sonido poco habitual en un mitin político.
Claudiu Târziu, fundador de AUR junto a George Simion, senador, y candidato europeo, afirmó que “Tenemos la posibilidad a través de las elecciones, a las que asistirá la mayor cantidad posible de rumanos, de cambiar este régimen vil que nos ha mantenido a todos en la esclavitud durante más de tres décadas. Tenemos la oportunidad de liberar al estado rumano, cautivo de las bandas depredadoras, y devolvérselo a sus ciudadanos, es decir, a todos nosotros. Para recuperar nuestro país, cambiar el estado y cambiar la política suicida de Bruselas hoy, debemos ganar todas las elecciones el próximo año. Europa debe volver a la normalidad y esa es la apuesta de las elecciones al Parlamento Europeo. Queremos permanecer en la Unión Europea, pero queremos ser tratados con dignidad, queremos ser tratados como socios iguales y sabemos que esto es posible”. Târziu es un hombre clave en el partido con una amplia trayectoria en la sociedad civil y un defensor acérrimo de la familia tradicional, luchador provida avocado a frenar el avance de la ideología de género en su país.
Los mensajes de AUR son claros, igual que su linea política y sus objetivos y quedan reflejados no solo en sus discursos, sino en sus actuales propuestas parlamentarias, en sus formas, su estilo de comunicación e incluso en la cuidada estética, como se ha visto en el Parque Carol I de Bucarest, algo que no es común en otros países europeos, y que tiene más que ver con sus señas de identidad, con una idiosincrasia puramente rumana. Esa manera de acercar la política a la gente, directa y cercana también puede ser un aporte interesante en en Parlamento Europeo. Una cuestión a tener también en cuenta en estas próximas elecciones para los rumanos, es la llamada “diáspora”, es decir, los millones de rumanos que hoy viven fuera de su país sobre todo por motivos económicos. AUR puede llevarse más del 50% de esos votos ya que en las anteriores elecciones fue el segundo partido más votado fuera del país con un 26% de las preferencias: los primeros en Italia, y los segundos en España, Alemania y Francia.
Como se puede apreciar, muchas son las señales del crecimiento de una opción conservadora en el Parlamento Europeo. Es posible que en menos de un año, se pueda comenzar a ver el principio del final de un largo período de políticas suicidas en la UE. Desde de los confines del antiguo Imperio Romano también se oyen voces disidentes a la hegemonía burocrática de Bruselas.
Foto: José Papparelli.